La neutralidad no es una virtud. Es el escondite de una razón que, incapaz de soportar la tensión del conflicto, prefiere contemplar el mundo desde lejos. Se disfraza de prudencia, de equilibrio, de sensatez, pero lo que realmente encubre es una renuncia: la de comprender la realidad en su justa medida, con toda la violencia, desigualdad y contradicción que la constituyen.
Polarización: el nuevo eufemismo del poder
Llamar polarización a lo que sucede es un acto de legitimación. Permite al capitalismo presentarse como el “punto medio” razonable, el espacio de la convivencia frente a los fanatismos. Pero ese centro no es neutro: es el eje de una estructura que necesita de la subordinación constante de los muchos para garantizar el privilegio de los pocos.
Un acercamiento a los Consejos Comunales, las Comunas y el Estado Comunal en el Proceso Bolivariano
El proceso político iniciado en Venezuela a finales del siglo XX planteó que la democracia debía dejar de ser un ejercicio limitado a la representación electoral y convertirse en un sistema donde la participación popular (democracia participativa y protagónica) estructurara de forma directa la toma de decisiones. Esta transformación parte del principio de que la comunidad organizada no solo puede diagnosticar sus necesidades, sino también gestionarlas y resolverlas en colectivo. Es en este marco donde emergen los Consejos Comunales como célula básica del ejercicio de autogobierno.
Destino Manifiesto, Sionismo e Imperialismo: La Ideología de la Dominación
La historia moderna no puede comprenderse como un simple desarrollo de ideas o misiones espirituales, sino como el despliegue de un modo de producción que busca expandir sus condiciones de existencia. Las narrativas de elección divina o de destino histórico no son causas de la expansión imperial, sino formas ideológicas que expresan y legitiman intereses materiales: la necesidad del capital de conquistar nuevos territorios, mercados y fuentes de trabajo y recursos.
El llamado “Destino Manifiesto” estadounidense y el sionismo político no son excepciones culturales o religiosas, sino expresiones históricas de un mismo proceso: la mundialización del capital bajo ropajes morales y teológicos. La teología se convierte en superestructura legitimadora de la acumulación, y la expansión territorial en condición de reproducción del sistema capitalista.
Propiedad. Doctrina Social de la Iglesia y Marxismo. Puntos en común.
Pocas palabras han sido tan secuestradas por el poder como propiedad. En su nombre se han construido imperios, se han cometido guerras y se han justificado desigualdades. Pero ni siquiera las tradiciones más conservadoras de la historia del pensamiento cristiano llegaron jamás a aceptar que la propiedad fuese un derecho absoluto, intocable, divino.
Enola Holmes. Lucha de clases y feminismo para niñas y niños. Manual para madres y padres.
Las películas de Enola Holmes parecen simples aventuras detectivescas ambientadas en la Inglaterra victoriana. Pero si se miran con atención, son una ventana perfecta para hablar con los niños de temas profundos: las desigualdades entre ricos y pobres, las causas de esa desigualdad, la opresión de las mujeres y el papel del Estado en mantener ese orden.
Los Pro-Vida somos los «rojos»
No permitamos que secuestren el significado de «vida». La vida no es solo un óvulo fecundado. La vida es el pan en la mesa, el libro en la escuela, la medicina en el hospital, el techo sobre la cabeza.
Antiabortismo y explotación de clase
El discurso antiabortista suele presentarse como una defensa moral y absoluta de la vida. Sin embargo, una mirada materialista revela una contradicción fundamental: a las élites que promueven estas políticas solo parece importarles el feto mientras permanece en el vientre materno. Una vez nacido, ese niño ingresa en una sociedad donde esas mismas élites bloquean sistemáticamente cualquier intento de garantizarle una existencia digna. En este sentido, el antiabortismo no puede comprenderse como una ética universal de la vida, sino como un mecanismo ideológico al servicio de la reproducción del orden capitalista.
El problema de llamar izquierda a lo que no lo es
Uno de los mayores obstáculos para la construcción de un horizonte emancipador en nuestro tiempo es la confusión deliberada en torno al término izquierda. Se ha convertido en costumbre llamar “izquierda” a proyectos políticos que en realidad no cuestionan en lo más mínimo las bases del sistema capitalista. Esta operación, aparentemente inocente, acarrea graves consecuencias.
¿Por qué la propiedad de los medios de producción define tu realidad?
Entender que la propiedad de los medios de producción es el eje sobre el que gira nuestra realidad no es adoptar una ideología radical. Es, simplemente, aprender a leer las reglas del juego en el que, nos guste o no, estamos jugando. Solo entendiendo las reglas, podemos empezar a discutir si queremos seguir jugando con las mismas, o cambiarlas por unas más justas.
Historia vs. Memoria
La diferencia entre historia y memoria no es un debate académico, sino un campo de batalla político. La historia oficial es el discurso con que los vencedores legitiman su poder; la memoria, en cambio, resiste en nombre de los vencidos.
¿Por qué vives peor que tus padres?
Si hoy la vida parece más precaria, más fragmentada y sin rumbo, no es por culpa de quienes llegan de fuera, ni por un supuesto “exceso de derechos”. Es porque cuando desapareció la Unión Soviética, aún con sus problemas internos y contradicciones, el capitalista dejó de temer a la clase trabajadora.
¿Crisis de representatividad o fin de época?
En las últimas décadas, Europa ha asistido a un fenómeno político cada vez más extendido: la dificultad de formar gobiernos de mayoría estable. Parlamentos fragmentados, proliferación de partidos, coaliciones inestables y bloqueos institucionales se han convertido en la norma. No se trata de una mera anomalía coyuntural ni de un cambio cultural pasajero. Detrás de esta crisis de mayorías se esconde un proceso más profundo: el capitalismo ha multiplicado sus contradicciones internas y, al mismo tiempo, ha conseguido separarlas unas de otras, hasta el punto de individualizar la experiencia subjetiva de la confrontación política.
La policía no es neutral: origen histórico y función de clase
Una de las creencias más extendidas en nuestras sociedades es que la policía existe para proteger al individuo. Se la presenta como un servicio neutral, un árbitro imparcial que vela por la seguridad de todos. Sin embargo, una mirada materialista revela otra cosa: la policía es, desde su origen moderno, un aparato del Estado burgués destinado a garantizar la reproducción del orden social basado en la propiedad privada y la explotación de la clase trabajadora.
La política mundial sobre drogas: un obstáculo al crecimiento humano
La política mundial sobre drogas no es solo un error: es un freno al crecimiento humano y una muestra de desprecio hacia las tradiciones ancestrales. Estas políticas han ignorado cómo muchas culturas han integrado el uso de sustancias psicoactivas como parte esencial de su desarrollo cultural, espiritual y social. Más allá de la hipocresía y los intereses comerciales que sustentan las políticas actuales, lo verdaderamente preocupante es cómo bloquean el potencial de los psicodélicos para transformar no solo a los individuos, sino también a la humanidad en su conjunto.
Teilhard de Chardin: una espiritualidad evolutiva que el comunismo no puede ignorar
Nosotros, como comunistas, hemos tendido a rechazar la religión en bloque, considerándola siempre como el opio del pueblo. Pero sería un error estratégico ignorar que muchos siguen buscando respuestas en lo espiritual. Si hay una manera de ofrecer una espiritualidad revolucionaria, que hable de unidad, progreso y colectivismo, ¿por qué no explorarla?
Construir Futuro
La izquierda debe superar el infantilismo de dividirse en innumerables partidos por cuestiones circunstanciales o de forma, y entender que solo su reunificación en un partido de vanguardia fuerte y cohesionado podrá reconstruir el espacio de la clase trabajadora y marcar la agenda del futuro, así lo ha demostrado la Historia. Una reunificación que no se base en la mera confluencia de siglas o en la simple coalición de intereses tácticos, sino en la construcción de una ideología común sólida y un programa de transformación radical que sea compartido y defendido con convicción por todas las partes.
Reinterpretando a Adam Smith: propiedad, economía, libertad y bien común
A medida que observamos cómo ha cambiado el papel de la propiedad privada hasta nuestros días, podemos reinterpretar su obra como parte de un proceso evolutivo, en el que la economía debería servir, ante todo, al desarrollo material, intelectual y ético de las personas. No tenemos motivos para pensar que un individuo capaz de ofrecer un discurso progresista para su época, especialmente en cuestiones relacionadas con la propiedad y la libertad, no haría lo mismo en nuestro tiempo.
El comunismo y su rechazo histórico al terrorismo como forma de lucha reaccionaria
El comunismo, desde sus orígenes, ha rechazado el terrorismo como una forma de lucha reaccionaria que ni emancipa ni construye poder popular. El camino de la liberación no pasa por la acción desesperada de individuos aislados, sino por la organización política de masas, la conciencia de clase y la lucha colectiva contra el capitalismo y todas sus formas de opresión.
La violencia puede ser parte de la revolución, pero nunca como terrorismo: solo como expresión consciente de un pueblo organizado que toma en sus manos su destino.
Tolerancia Cero con la Intolerancia: la libertad no es neutral
Estamos convocados a dar la batalla de las ideas y, al mismo tiempo, la batalla política para transformar las reglas del juego. Defender la libertad significa impugnar, legislar y perseguir a quienes la convierten en arma contra la igualdad.
La libertad no se defiende sola. Se organiza, se protege y se legisla. Y si no lo hacemos ya, corremos el peligro de que se repita lo peor de nuestra historia.
